Se denomina síndrome de Burnout o síndrome de “estar quemado” cuando la persona se siente agotada físicamente, mentalmente y emocionalmente a causa del cansancio psíquico o del estrés que surge de la relación con otras personas en un dificultoso clima laboral.
Normalmente, la persona llega a un estado de incapacidad para continuar con el trabajo habitual. Entonces, la persona siente una disminución significativa del rendimiento y la motivación laboral.
Los síntomas más frecuentas del Burnout son los siguientes:
- Dolores físicos como dolor de cabeza, dolor muscular, mareos, dificultades con el sueño, pérdida de peso, afecciones en la piel, entre otros.
- Sensación de desbordamiento ante las demandas emocionales de los demás.
- Incapacidad de concentración.
- Incapacidad de desconexión al finalizar la jornada laboral.
- Estado de ánimo irritable.
- Sentimientos de frustración y fracaso al no cumplir las expectativas deseadas.
- Falta de energía.
Entonces, ¿Cómo actuar ante el síndrome de Burnout?
Os damos una serie de recomendaciones:
- Permítete parar para poder descansar y no acelerar el ritmo de trabajo.
- Aprende a establecer límites tanto a ti mismo como a los demás.
- Cultiva un buen ambiente de equipo ya que, si se promueve la colaboración, habrá un mejor clima laboral.
- Cuida de ti mismo. Es decir, atiende las señales tu cuerpo y las emociones.
- Busca apoyo familiar y social.
- Separa el ámbito laboral del personal, desconectando al final de la jornada laboral.